Boda de William y Kate: Síes y Noes

A estas alturas ya tendréis muy vistos los modelos lucidos por la novia y las invitadas a la boda real inglesa celebrada esta tarde, así que no me voy a repetir mucho y os detallaré quiénes fueron para mí las más elegantes, las que no estuvieron a la altura y las que ni sí ni no.

SÍ

Kate Middleton, la novia, me sorprendió muy gratamente. Su vestido, firmado por Sarah Burton para la casa Alexander McQueen, era un diseño clásico, de corte romántico y sencillo, bastante alejado de la teatralidad y los excesos del fallecido creador británico . Me gustó mucho la frescura que le otorgaba llevar el pelo semi suelto, detalle que casi nunca se ha visto en bodas reales (Lady Di sí lo llevó suelto, pero el suyo era corto).

Su hermana, Pippa Middleton, ha levantado pasiones con este sencillo diseño blanco de la colección Pre Fall de 2009 de McQueen (mucho se ha hablado de este polémico color para una dama de honor, pero lo cierto es que responde a una tradición inglesa que dicta que las damas de honor deben llevar el mismo color que la novia) y no es para menos, pues el bonito vestido, de falso escote doble, lucía perfecto sobre su esbelta figura.

La hermanísima volvió a deslumbrar en la cena post boda con este modelo de satén en verde esmeralda firmado por la británica Alice Temperley, con broche bajo el pecho y clutch metalizado. Infinitamente mejor que el de su hermana Kate en la misma fiesta que podéis ver más abajo.

La madre de la novia, Carole Middleton, destacó por su sencillez y elegancia con este traje en color celeste de Catherine Walker. Lució una bonita pamela, de Jane Corbett, y optó por el bolso y los zapatos en color humo.

Máxima Zorreguieta nunca suele defraudar en este tipo de eventos y en esta ocasión sorprendió con un vestido de encaje en color maquillaje y turbante del mismo tono.

Otra que tampoco suele fallar y que también me gustó fue Charlene Wittstock, quien llevó un abrigo en gris azulado de Armani Privé y pamela y zapatos a tono.

Tara Palmer-Tomkinson, amiga de los Príncipes de Gales, también deslumbró con un total look en azul klein con tocado firmado por Philip Treacy.

NO

La princesa Letizia parece haberle cogido gusto al tono maquillaje para los eventos de esta solera, pero en mi opinión este vestido de Felipe Varela no le favorece especialmente y el sombrero le echa años encima.

Eugenia de Inglaterra tampoco acertó. Su extravagante Vivienne Westwood azul eléctrico en combinación con sus generosas formas y su exagerado tocado no le hicieron ningún favor.

Myriam González, la esposa del viceprimer ministro Nick Clegg, no iba nada apropiada con este vestido de tul con lunares de Miguel Palacio, guantes negros y enorme tocado de flores.

NI SÍ NI NO

El vestido post boda de Kate Middleton pecó de soso y encima lo remató con una modosita rebeca de angora, que sin lugar a dudas, sobraba.

La princesa Beatriz, quien a pesar del extraño y descomunal tocado, lució más o menos elegante con un abriguito en tono nude de Valentino Alta Costura. 

Victoria Beckham demostró que se puede ir embarazada y con estilo con este minimal vestido amplio azul marino de su propia firma, pero sus excesivas plataformas de Louboutin estropearon en cierta manera su look.

Victoria de Suecia, aunque llevaba este bonito diseño en color salmón con pamela a tono, no me convence, quizás es por ese recogido tan tirante que le restaba naturalidad.

La esposa del primer ministro David Cameron, Samantha Cameron, optó por este vestido en color aguamarina de Burberry. Bien por atreverse a saltarse la ‘regla’ de combinar zapatos y vestido, pero mal por prescindir de sombrero o tocado, demasiado sencilla quizás.

¿Cuáles son vuestras favoritas? ¿Quiénes no acertaron en vuestra opinión? ¿Alguien sabe por qué no asistieron a la boda ni Marie Chantal Miller ni Tatiana Blahnik que sí estuvieron en la cena de gala previa?

Fotos: Zimbio, Mirror.